El Instituto de Educación Secundaria Miguel de Cervantes de Granada ha acogido durante esta semana la celebración de un programa piloto de formación masiva en Soporte Vital Básico (SVB) para todos sus estudiantes (282 en total). Se trata de un proyecto pionero avalado tanto por nuestra Sociedad Científica como por el Departamento de Medicina de la Universidad de Granada (UGR) y que tiene como objetivo valorar la efectividad de introducir la formación en soporte vital como materia reglada para todos los alumnos de educación secundaria, de forma que a medio plazo el aprendizaje de la Reanimación Cardiopulmonar (RCP) forme parte de los contenidos curriculares de los estudiantes de secundaria de todo el país. Para el desarrollo de esta iniciativa también se ha contado con la colaboración del Departamento de Didáctica y Organización Escolar de la UGR, gracias al cual se ha podido obtener el soporte metodológico para el desarrollo del proyecto.
Con el fin de certificar la efectividad de esta acción, se han puesto en marcha un estudio científico que entra a formar parte de dos trabajos de fin de Grado para alumnos de sexto de Medicina de la Universidad de Granada y una tesis doctoral, trabajos de investigación con los que se pretende demostrar el impacto que la formación en soporte vital de los alumnos de educación secundaria puede tener para la supervivencia de los pacientes en Parada Cardiorrespiratoria (PCR) y la utilidad de la integración de dicha formación en los programas curriculares de los alumnos de educación secundaria como ya ocurre en otros países de nuestro entorno continental, como es el caso de Noruega, donde esta actividad ha ayudado a reducir de la mortalidad de los pacientes en situación de PCR.
Durante el pasado año la totalidad del claustro de este centro ya recibió formación reglada en soporte vital, consiguiendo la solicitud de Área Cardioasegurada ya que además de la formación en soporte vital básico y desfibrilación externa automatizada, el centro ha adquirido un dispositivo de desfibrilación externa semiautomática. Actualmente se está a la espera de recibir la concesión por parte de la Junta de Andalucía de la designación de Espacio o Área Cardioasegurada.
Desde la SAMIUC insistimos en la necesidad de difundir conocimientos y habilidades en soporte vital a la población general, ya que al tratarse de un problema de salud pública es imprescindible la implicación de todos los agentes sociales para mitigar el drama que supone esta enfermedad. Actualmente, cuando la parada cardiorrespiratoria sucede fuera del hospital sólo una de cada cinco víctimas recibe RCP, una intervención que, realizada a tiempo y sin esperar a los profesionales especializados, puede lograr que la persona sobreviva –por cada minuto que el paciente está en parada cardiorrespiratoria sin maniobras de resucitación, las posibilidades de supervivencia se reducen un 10%– y, además lo haga sin secuelas, ya que la reanimación cardiopulmonar a tiempo reduce considerablemente las secuelas neurológicas. Sólo en el pasado año desde la SAMIUC se formó a cerca de un millar de personas en técnicas de RCP.